El Heat le acaba de ganar a los Celtics 109-103 de visitantes en un duro y áspero tercer juego de las finales de la conferencia este de la NBA e inclinó la balanza 2-1 a favor de los de Miami con el costo de una lesión que puede pesar mucho a futuro.
Primera mitad:
Primer cuarto: Una avalancha de los que comanda Erik Spoelstra se hizo presente desde el comienzo tras un parcial de 14-4 que forzó el primer tiempo muerto de su rival. Se apreció el sistema de juego que propone este equipo desde hace largo tiempo con el sistema defensivo que los identifica. Del otro lado de la cancha, comenzaron muy finos desde el triple y muy agresivos hacia la zona pintada de Boston, que no contó en esta cita con Robert Williams III, su mejor defensor interior, debido a una hinchazón en la rodilla que se operó anteriormente. Bam Adebayo se hizo presente desde el inicio y demostró una soltura ofensiva y eficacia que destacó sobre el resto. Del lado del local, Daniel Theis no estuvo a la altura de suplir al pívot titular de su equipo y el ataque de los sureños lo dejó en evidencia. Por otro lado, el la generación y ejecución de todo el equipo fue atascada, pero Jaylen Brown entró en racha y nos demostró que no se puede dudar de él como anotador, y así acortó un poco la brecha sobre el final del primer período para finalizar 39-18.

Segundo cuarto: Los de Florida comenzaron a cerrar las cercanías del aro y complicaron cada tiro de tres de los Orgullosos. Poco a poco, empezó a notarse la incomodidad Jayson Tatum ante el esquema que planteó Spo para sus dirigidos, especialmente PJ Tucker, que hizo un enorme papel ya que raspó al portador de la 0 y se fajó con internos en múltiples ocasiones. Luego, volvió Kyle Lowry del vestuario luego de una molestia y se notó la evolución en como estaban organizados en la pista con constantes pick and rolls que hizo el base con el big-man y explotaron la pintura verde con 32 puntos antes de que finalice la primera mitad. Así fue como llegó el segundo tiempo pedido por Ime Udoka cuando estaban perdiendo 46-20, con 11 producidos por su escolta, mientras que su banca había producido ningún punto, a diferencia de la del otro coach, con 15. El partido se volvió demasiado físico, y tras un parcial de 12-2 liderado por Al Horford y JB, pudieron acercarse bastante a una ventaja que llegó a ser de casi 30.
Segunda mitad:
Tercer cuarto: El Calor era bastante independiente de Jimmy Butler en el primer tiempo gracias a una gran actuación coral en casi todos los aspectos del juego. Pero en el vestuario, dicha franquicia se encontró con una pésima noticia, ya que su líder y mejor jugador iba a ausentarse por el resto del encuentro luego de un duro golpe en la rodilla. El encargado de ingresar a ocupar el puesto del alero nacido en Texas fue Victor Oladipo y en una de sus primeras jugadas, el dos veces all-star, terminó cayendo por encima del tobillo de Marcus Smart, el cual se fue a los probadores a intentar sanar. Este tercer cuarto estuvo lleno de errores no forzados por parte de ambos bandos, Tyler Herro no pudo demostrar por qué ganó el sexto hombre del año, pero la experiencia del base campeón en 2019 y que el jugador número 13 se vista de bombero, fueron los causantes de que el el sembrado número 1 se mantenga palo a palo con el segundo en dicha tabla, que era constantemente impulsado por su segunda espada y el contagio emocional que brindó la vuelta al court del actual DPOY. Terminaron ese período 25-25, tras una lucha constante.

Cuarto cuarto: Las malas selecciones de tiro de los Heaters y se respondió con eficacia, y por esos momentos hubo una diferencia de 9. Los del noreste corrieron atrás en todo el desarrollo de este evento, pero su segunda espada fue la encargada de llevar esa diferencia abismal a tan solo un tanto en el primer momento clutch de esta serie. El Heat estaba aguantando sin su superestrella, con ataques lentos, poco organizados y prevenibles, pero la verticalidad, adrenalina y poca paciencia que ejercieron los Celtics fue tan ambiciosa que terminó en 23 perdidas, de las cuales 17 fueron de su Big-Three. La daga llegó de la mano del veterano ex-Raptor, que tras un robo sirvió una bandeja y logró que sus competidores comiencen a forzar faltas.
EL BALANCE:
Un partido roto desde la lesión del 22 de Miami. La superioridad deportiva y la enorme ventaja en el marcador que lograron en la primera etapa fue el colchón que los salvó de la tormenta que tenían enfrente a ellos. El sistema de este equipo en cuanto al repliegue y presión a las posesiones de sus oponentes es sencillamente brillante. y los 19 robos que tuvo el roster que lo integra dan muestra de ello. En cuanto a la individualidad, Adebayo dio un paso al frente y luego de tantas críticas sobre sus playoffs terminó con una línea estadística de 31 anotaciones, 10 rebotes y 6 asistencias, y junto a Lowry lideraron a sus pares para llevarse esta victoria a las playas del sur, aunque con mucha atención a los problemas físicos de Jimmy Buckets y todas las consecuencias que podría traer.
Por el otro lado, para los Celtics es una derrota positiva, ya que luego de llegar a estar 26 puntos por debajo, lucharon hasta el final con una versión muy apagada de Tatum, el cual fue marcado de forma excepcional por PJ Tucker y otros doblajes que proponían guardias adversarios. Por otra parte, Brown jugó un autentico partidazo y terminó con 40 puntos y 9 recobres, siendo el único jugador en la historia de esta franquicia en tener un partido de postemporada con+40pts y +70% en tiros de campo. Al Horford hizo un gran trabajo también y fue el encargado de bajar 14 balones y anotar 20 para su planilla. Definitivamente esto es un tropiezo para Boston y seguramente Udoka aprenderá de esto y preparará muchos ajustes para el próximo juego, así como hizo en la victoria del jueves en el FTX Arena.
¿Cómo sigue esta serie?
El lunes 23 de mayo a las 21:30 (hora argentina) tendremos el juego 4 de las finales de la conferencia este.

Estudiante de segundo año de periodismo deportivo. Amante de la táctica, estadísticas y análisis.